sábado, 10 de enero de 2009

Ha vuelto el gato mayor...

En poco tiempo me tendré que desprender de Bicho, mi gato. Irá a acompañar a ZaZá, la gata de una amiga maternal que se apiadó del estrés de mi gato, porque claro, él no soporta a mi mamá como ella no soporta a mi gato. Lo encontré una mañana en mi oficina, que colindaba con una casa abandonada. Abrí la puerta y salió corriendo un minino flaco y sucio, maullando finito. La ventana estaba abierta, así que debió entrar por ahí. De eso, hace dos años. Mi madre nunca lo soportó, y menos aún cuando nos mudamos de nuestra casa grande a un departamento pequeño. Ya no tenía techos donde trepar y sólo le quedó mirar por la ventana el mundo que no tenía. Debo dejarlo ahora irse con Zazá, con quien le espera una vida en compañía y quizá algunos gatitos. Miau.



... ¡Y que pasen los gatos!!!!










3 comentarios:

  1. Que linda foto me gusta que este en modo sepia esa foto , y como las sombras caen en tan fragil cuerpecito, i loooove itt!! un beso amix. U gato que causa ternura.

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  2. Chévere Insecta, desde aquí nuestro apoyo. Sigue haciendo volar tus post, pero VOLAR!!! no por sólo dos semanas. Visita nuestro espacio, ojalá puedas seguirnos, y más que eso colaborar con nosotros (Poesía, Cuento, Ensayo o Artículos).

    Un gran abrazo y bacán por tu iniciativa. Estaremos pendiente de tus publicaciones.

    Cromwell Pierre.
    GLS.

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  3. Es normal preferir los gatos, independientes, altivos, majestuosos. Aunque en el trabajo todos me dicen que a los hombres no les gustan los gatos.

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